Ver un corte publicitario de Antena 3 despues de meses sin ver un solo segundo de la programación de la caja tonta es algo que puede inducir a un shock al más pintado. Anuncios y anuncios, uno detrás de otro, en vena. Mira que a mi me encanta la publicidad vintage, pero es que si este atracón te pilla desprevenido acabas peor que Pocholo despues de una noche de fiesta con Koto Matamoros.
Esto es algo de lo que he aprendido:

- Aun sigue la moda del Chill Out, que yo creía extinta hace años. Lo más último parece ser un recopilatorio de flamenco-chill con versiones de Jose Luis Perales.

- Al fin he escuchado ese fraude llamado Bhangra, la danza del vientre. Por lo escuchado ni suena a Bhangra ni a danza del vientre. Es como una imitación de musica de Shakira con unos gilipollas haciendo batuka.

- Que venden unos dedales-bota de futbolista "oficiales" de la Champions. En mis tiempos teníamos el subbuteo y los cromos del Mi Merienda, que eran de plastico y se ponían de pié. Mi favorito, Arconada.

- Los anuncios de infografía siguen a la orden del día. Los hay con una animación cojonuda (como los de Puleva o Danone) y otros que dan mas pena que un drama coreano (Central Lechera Asturiana y su terrorífico león peludo, la antimascota por antonomasia).

- Antena 3 usa tecnicas de marketing subliminal en las promos de La Noche de las Series Americanas, es decir Sin Rastro y Los Simpsons.

- Que todos los cachorros del culebrón Rebelde Guays tienen su propio cd. Me quedo con el de Lara, "con tan solo 16 años ha sacado su esperado primer disco, el himno de tu generación". A mi me parece que la tal Lara tiene como 10 años más. O sea, que debe ser el himno de la generación anterior.

- En los anuncios de clinicas de adelgazamiento siguen saliendo chicas como salidas de Mathaussen con cara de que les sobran unos kilitos (los mismos que les faltan de masa encefalica).

Vamos, que la cosa sigue como siempre.