Festivales y travestis.

Esta época del año es sencillamente agotadora. Festival Asia, Festival de Sitges, Revista, Ciclos, otros festivales, ediciones de video y demás trabajos adyacentes acaban con el más pintado. Ahora estamos en pleno apogeo del Festival Asia, y por fortuna, parece que el público está respondiendo (excepto en Jism, que fue vista por unas cuantas ancianitas seguidoras del thriller erótico indio y poco más). Hoy tenemos otro buen atracón de películas, incluyendo una de superheroes filipinos de la risa. A ver que tal va.
En otro orden de cosas, por lo que estoy oyendo (mi hermano me ha puesto al día) el último Gran Hermano parece ser el definitivo: un travesti calentando a un paleto, dos gemelas que no se aguantan, un negro (lo que desconozco es si dentro de la casa hay también uno del ku klux klan, para más algarabía popular). Que maravilla. Es el programa trash definitivo. Yo el último que vi fue el que salía el tal Pepe poniendo loca a una que no había salido de su casa en su vida. Patetismo voráz. Aquel en el que todas las tías de la casa eran lesbianas tampoco estuvo mal, aunque esperaba un festival de linguini que nunca llegó. Cosas de la educación en el cine trash.