Anoche tuve un sueño...

En el sueño estaba en una ciudad que podía ser Barcelona, o podía no serlo. Los edificios eran enormes, mucho más grandes de lo normal, y no tenia ni idea de donde me encontraba. Acababa de despedirme de alguien, una chica, con la que había estado hablando en un banco y a la que tenía la sensación que no iba a volver a ver.
Intentando encontrar una boca de metro con la que encontrar el camino para llegar a alguna parte, me hallé en mitad de un aparcamiento que daba a enfrente a una gran estación, donde podria encontrar el tren que me llevara a algún destino conocido. En ese momento reparé en que me faltaba una de las zapatillas de andar por casa que llevaba puestas en mi absurdo viaje. Aunque estaba seguro que acababa de abandonar mi pie no lograba verla por ninguna parte. Buscaba y buscaba debajo de los coches y allí podía ver decenas de zapatillas, deportivas, botas y todo tipo de calzado. Pero mi zapatilla no estaba. Yo quería mi zapatilla . El tren partió y allí seguí yo, buscando una zapatilla que ya nunca iba a volver a ver.

Este fue mi sueño de anoche. Quizá tenga que ver con cosas que me han sucedido ultimamente. Tengo una extraña sensación de nostalgia respecto a navidades pasadas.

A falta de algo mejor, ayer me preparé una vispera de Navidad cinéfila. De entrantes me ví (al fin) È Già Ieri, una reciente coproducción hispanoitaliana que se estrenó aquí como El día sin fin. Es un remake de Atrapado en el tiempo con Antonio Albanese en vez de Bill Murray. Yo que creia que iba a ver el castañón del siglo y resulta que la pelicula es buenisima, maravillosa. Como está rodada en las Canarias salen un monton de españoles: Pepón Nieto, Goya Toledo, Beatriz Rico...increiblemente, todos ellos están de pm. No se el porqué esta peli ha pasado tan desapercibida. Incluso Albanese está genial en el papel de cabronías absoluto. Y la sra. Asunción Balaguer, la viuda de Paco Rabal, tan entrañable. Tan recomendable como Un Franco, 14 Pesetas, quizas la mejor pelicula española de este año, por encima del merluzo del Almodovar, pero así va el país.

Para rematar y, antes de que llegara la familia, me vi otra entrega del ciclo de Vittorio de Sica, Il Giudizio Universale. Obra Maestra. No hay más palabras. Podría analizar minuciosamente el porqué de mi afirmación, pero es mucho mejor que la veais por vosotros mismos.

Los próximos días los pasaré entre amigos: borracheras con Angel (y seguramente también con Carlitos), alguna peli en el cine, maratón de ostias (con Mario, que dice que va a traer alguna de sus delikatessen) y más de un evento con Borja también. Con ellos intentaré evadir mis pensamientos de mi lamentable vida sentimental, de la cual cada vez estoy más convencido que se parece mucho mas a una película coreana que a una de Bollywood, como me gustaría a mi.

Y como esto me ha quedado entre el drama y el esperpento humano, añado un videoclip homenaje a Chema, el panadero estrella de Barrio Sesamo, que no tiene nada que ver ni con mi vida personal, ni con las navidades, pero que, como soy así de raruno, lo pongo para que lo disfruteis. O no.